El Juzgado de Instrucción número 13 de Valencia encargado de la investigación del caso Azud ha revelado que se llegaron a alcanzar los 7 millones de euros para pagar “comisiones ilícitas en metálico” a cargos y funcionarios públicos, a cambio de favores urbanísticos entre los años 1999 y 2013. Algunos de los principales implicados son el empresario Jaime Febrer y su conglomerado empresarial Grupo Axis, por presuntamente haberse aprovechado de varias operaciones ofreciendo regalos, ‘mordidas’ y otros beneficios. El sumario del caso adjunta nueve operaciones urbanísticas en las que prevalecieron “intereses económicos frente a los intereses públicos”, según apunta la jueza, y en las que intervino el Grupo Axis. Por tanto, se investigan prevaricación, delitos de tráfico de influencias, cohecho, falsedad documental, blanqueo de capitales, asociación ilícita y organización criminal. También se han encontrado evidencias de que el PSPV-PSOE pagó la campaña de buzoneo de Unión Valenciana en las elecciones de 2007, para frenar las victorias electorales que encadenaba el Partido Popular en la Comunidad Valenciana desde 1995. La campaña de ‘mailing’ fue ejecutada por la empresa Key, que contrató a su vez a la mercantil Meydis, la cual se encargó de realizar “trabajos de cierre manual de sobres” que costaron 102.080 euros. Los tres grandes salpicados de esta investigación son Alfonso Grau, ex vicealcalde de Valencia; Rafael Rubio, ex portavoz del PSPV en el Ayuntamiento de Valencia; y Jorge Bellver, diputado del PP y vicepresidente segundo de Les Corts. En el caso de Grau, se conoce que se llevó 300.000 euros a la sucursal de su banco, BBVA, en París, a finales del año 2015. En efecto, se encargó de firmar un documento en el que aseguraba que su voluntad de abrir una cuenta allí con esa cantidad de dinero se debía a que “tenía miedo ante la incertidumbre política en España en las próximas elecciones y deseaba diversificar el riesgo ante el posible resultado de estas”. El sumario coloca a Grau como el gran beneficiado de la trama con dos millones de euros en efectivo, un incremento de su propio patrimonio, propiedades inmobiliarias de lujo y comerciales y todo tipo de regalos navideños. Todo esto, supuestamente, financiado por Jaime Febrer. Sin embargo, Grau no ha sido el único al que Febrer ha entregado buenos regalos. En el sumario consta que el diputado popular Jorge Bellver también se habría beneficiado de un par de relojes de lujo valorados en 3.000 euros y 2.265 euros entre los años 2003 y 2007. Por su parte, Rafael Rubio obtuvo presuntas bonificaciones por minimizar las críticas públicas desde el PSPV. Aun así, también se investigaron posibles participaciones en empresas públicas como Egevasa, Emivasa y Aumsa.