El expresident de la Generalitat Valenciana Francisco Camps ha vuelto hoy a la Audiencia Nacional para sentarse en el banquillo de los acusados por las presuntas irregularidades en la adjudicación a Orange Market, una de las empresas en la trama Gürtel del stand de Fitur en el año 2009.

La cita estaba prevista para el pasado lunes. Sin embargo, el tribunal posponía la vista oral una semana por problemas en el acceso a la documentación que han sufrido algunos afectados. Entre ellos, el propio Camps, que es quien había solicitado este aplazamiento.

A su llegada al tribunal esta mañana, Camps ha denunciado lo que ha definido como "pactos secretos y obscenos" de la Fiscalía Anticorrpución con algunos de los principales acusados en el juicio, así como una "persecución feroz" por parte del ministerio público y del actual president de la Generalitat, Ximo Puig, contra su persona.

Camps se enfrenta a dos años y medio de prisión y diez de inhabilitación por su presunta implicación en el caso. No obstante, el expresident está convencido de su inocencia y de que "ninguna de las personas que están siendo juzgadas se ha llevado un euro a su bolsillo".

Junto al expresident se sientan en el banquillo otros 26 acusados, entre los que se encuentran los exconsellers Alicia de Miguel, Luis Rosado y Manuel Cervera.