En plenas vacaciones de verano, la fecha del 22 de diciembre parece que queda muy lejana. Sin embargo, muchos ciudadanos aprovechan sus visitas a otros municipios para comprar Lotería de Navidad.
Ya es una tradición hacerse con un décimo durante las vacaciones. Aquellos que creen en la suerte no quieren quedarse sin un número de ese lugar en el que veranean.
Por eso, las ventas crecen en verano en varios puntos de la Comunidad Valenciana, así como en Baleares, Canarias o municipios de la costa andaluza.
Un 2% del total de los décimos que se venden se hacen en estas fechas. De hecho, muchas administraciones aseguran que la afluencia de gente se nota bastante.
Además, este año se han incrementado las series hasta la 185 por número.