La unidad del dolor Vithas Valencia, alerta que con la bajada de las temperaturas y los cambios de presión atmosférica juegan un papel clave en la percepción del dolor.
El Dr. Ruben Rubio, médico de la Unidad del dolor del hospital Vithas 9 de Octubre, explica que "cuando la presión atmosférica disminuye, los tejidos que rodean las articulaciones pueden expandirse ligeramente, generando una mayor sensibilidad en la zona provocando dolor y rigidez". Además el frío hace que los musculos y tendones se contraigan, lo que pueda aumentar la sensación de incomodidad en quienes sufren enfermedades como la artrosis o la artritis.
Si el dolor es persistente o afecta a la calidad de vida, es importante acudir a un especialista para valorar el mejor tratamiento según cada caso y mejorar la calidad de vida con técnicas como inflitraciones o radiofrecuencia.
El dolor relacionado con el frío y la humedad afecta especialmente en personas mayores y pacientes con patologías crónicas del aparato locomotor. " No es un mito: el frío y la humedad pueden influir en la percepción del dolor". Por eso, en estos meses es fundamental mantener el cuerpo caliente, realizar ejercicio moderado y evitar cambios bruscos de temperatura", añade el Dr. Rubio.
Aún así, para mitigar estos síntomas, los especialistas recomiendan mantener una rutina de actividad física adaptada, utilizar ropa térmica y aplicar calor en las zonas afectadas, además de llevar una alimentación rica en antioxidantes y omega-3 para ayudar a reducir la inflamación y mejorar la movilidad articular.