La inflación continúa por la senda de la moderación, pero sigue sin dar tregua a las familias.
Tras rozar el 9% en el mes de septiembre, la tasa interanual del IPC ha caído en octubre hasta el 7,3%. Esto supone que cae más de un punto y medio por debajo del porcentaje registrado en septiembre, y se sitúa en el más bajo desde el mes de enero.
Esta moderación se debe al descenso en la energía, pero lo cierto es que los precios siguen subiendo. El dato de inflación subyacente, que mide la evolución de los precios, sin contar con los de la energía ni los alimentos no elaborados, se mantiene en el 6,2%, lo que significa que los precios siguen siendo muy elevados.