Esta madrugada se ha celebrado el acto más importante de las fiestas de La Vila Joiosa: el Desembarco. 

Las tropas moras llegaban por los mares de la localidad alicantina para recrear el episodio de 1538 en un espectáculo que combina la tradición con la emoción. 

María Muñoz, la reina cristiana, pasaba revista a las tropas antes de ir a la batalla dando así inicio uno de los eventos más icónicos de toda la Comunidad Valenciana. 

Las 24 naves han surcado los mares alicantinos hasta las primeras luces del alba, donde el emisario moro exigía la rendición de los cristianos.

Marcos Zaragoza, alcalde de La Vila Joiosa, compartía la felicidad después de que el desembarco haya sido un éxito: “Se vive con mucha responsabilidad y emoción. Hay un despliegue muy importante tanto de medios materiales como humanos para que todo salga bien”.

Además, mostraba su satisfacción como primer edil: “También siento mucho orgullo de estar aquí representando a todos los vileros”.