El anuncio de Pedro Sánchez de poner a disposición de las autonomías 50.000 viviendas de la Sareb destinadas a personas de escasos recursos se desdibuja cada vez más.
En el caso de la Comunidad Valenciana se contabilizaban cerca de 9.000 viviendas. Sin embargo, ni tan siquiera el Consell puede señalar un número de viviendas disponibles, ni la inversión que su puesta en funcionamiento supondría para la Generalitat.
La portavoz del Consell, Aitana Mas, señalaba este viernes que sería una cuestión que habría que valorar.
En este sentido, ha asumido que "tendremos que hacer una evaluación cuando tengamos claro como se materializa ese traspaso y valorar en qué estado se encuentran, cuáles pueden ser utilizadas y cuáles no".
Mas también ha señalado que, a partir de ahí, porcederán a analizar económicamente el presupuesto necesario para acondicionarlas y estudiar si vale la pena o no.