Primer rifirrafe entre la nueva alcaldesa de Valencia y su predecesor. Después de que María José Catalá anunciara que el nuevo gobierno municipal recuperaría la entrada de la Reial Senyera en el 'Te Deum' de la Catedral el 9 de octubre, Joan Ribó criticaba esta medida.
El exalcalde señalaba que esto eran las prioridades de la nueva corporación y no las personas y la ciudad. "Entrar con la Real Senyera en la Catedral en el Te Deum es más propio de elementos del franquismo, del nacionalcatolicismo, que de un estado aconfesional", afirmaba.
"Un ayuntamiento forma parte del Estado y el Estado es aconfesional. Todos (los vecinos de la ciudad) deben sentirse cómodos con el Ayuntamiento", ha manifestado.
La respuesta de Catalá no se ha hecho esperar. "Ribó me regaló un olivo y yo le voy a enviar un par de libros sobre la historia de Valencia porque ciertamente es Jaume I el que hace un oficio religioso cuando entra en la ciudad. Por tanto, lo del franquismo tiene malas notas", replicaba la actual alcaldesa.
