Los trasteros se han convertido en los últimos tiempos en un negocio inmobiliario en auge. Factores como la falta de espacio y o la adaptación de los hogares al teletrabajo que hemos experimentado en los últimos años han provocado el crecimiento de este negocio.
El bajo coste en la inversión y el alto retorno de la rentabilidad es otro de los motivos por los que cada vez son más los que apuestan por esta inversión inmobiliaria, y se suma la elevada duración de las contrataciones.
Aspectos que han provocado que la ocupación de este tipo de instalaciones alcance el 80% y que ya existan cerca de 600 instalaciones que se dedican a ello en España.