Pedro Sánchez anunciaba tras su periodo de reflexión que pondría en marcha un plan de regeneración democrática. Lo hacía después de la imputación de su mujer.

Hoy, dos días antes de la comparecencia de Begoña Gómez ante el juez, presenta las medidas que contempla ese programa, el cual pretende controlar la actividad de los medios de comunicación, ante una presunta intención de frenar lo que ha denominado como "máquina del fango".

El presidente del Gobierno ha vuelto a denominar a algunos medios como "pseudomedios" o "tabloides digitales" y ha anunciado una reforma de la ley para controlar la financiación de medios a través de gobiernos autonómicos. "Existe un vínculo probado entre la circulación de bulos, de desinformación en las redes sociales y en las tecnologías y el aumento de los delitos de odio", ha argumentado Sánchez.

El líder de los populares, Alberto Núñez Feijóo, le ha acusado de acudir al Congreso para intentar castigar a los medios que denuncian los presuntos casos de corrupución de sus familiares. "La única razón por la que está teniendo lugar este debate es porque la mujer del presidente del Gobierno está siendo investigada en un juzgado por presuntos delitos de corrupción en los negocios y tráfico de influencias, y porque su hermano también está en sede judicial por cinco presuntos delitos. El mayor bulo de España es usted", le ha recriminado.

Después ha llegado el turno de Santiago Abascal. El presidente de Vox también ha reclamado a Sánchez la situación de su mujer. "El Gobierno y el partido más corrupto de la democracia no pueden hablar de calidad democrática, pero vienen aquí ustedes y se atreven a hablar incluso de índices de calidad democrática", ha trasladado.