Centros laterales a la nada y las ocasiones claras, para el rival. Así volvió a ser un terrorífico partido del Valencia que, pese a su esfuerzo y mayor intensidad, se vería por detrás en el marcador a los 10 minutos de la segunda parte. Loïc Badé aprovechó la falta de contundencia defensiva del Valencia para mandar a la red el balón tras un saque de esquina.
Justo después llegaría la acción en la que todo Mestalla y todo el valencianismo clamaron contra Carlos Del Cerro Grande. Unas manos clarísimas de Fernando dentro del área no fueron señaladas como penalti pese a la revisión del VAR.
Fue otro golpe más para un Valencia que encajaría el segundo y definitivo tanto en el minuto 75 después de una combinación entre Ocampos y Montiel que terminó rematando Suso con un disparo dentro del área ante el que nada pudo hacer Mamardashvili.
Por si fuera poco, Ilaix Moriba se autoexpulsó en el minuto 84 con una dura entrada sobre Bryan Gil.
Con todo, al Valencia solo le quedaba tirar de un orgullo cada vez más tocado y contar los minutos para que la pesadilla se acabara para pensar en la siguiente final por la permanencia en Elche.