En un informe de más de 200 páginas la Guardia Civil destaca la inexistencia de avisos que hubo el día de la dana por parte de la Confederación Hidrográfica del Júcar. Dice que no fue hasta las 18:43 de la tarde cuando el organismo dependiente del Estado avisó de un dato 'extraordinario'. En esos momentos el caudal llegó a los 1.683 metros cúbicos. Una cantidad que denota según la benemérita de una "aparente ausencia de control sobre el registro de la Rambla del Poyo, justo en el peor de los momentos". 

La Guardia Civil entiende que "al menos en este episodio de inundaciones y dada las extraordinarias precipitaciones que se estaban registrando, era fundamental que esa información se transmitiera en tiempo para conocer la situación real de los volúmenes de agua que circulaban por los cauces de los cursos fluviales".

El instituto armado también carga contra la AEMET por no haber informado de las lluvias en tiempo real. Dicen que todos los avisos se emitieron con retraso, es decir, "con posterioridad al momento del comienzo previsto".

Todo esta información ha sido remitida por parte de la Unidad Organica de la Policia Judicial a la jueza de Catarroja que instruye la causa.