Como dice el veterano periodista Fernando Jáuregui, el análisis de los resultados de las elecciones vascas no daba anoche para hacer programas especiales de horas de duración.
En noches como esta última uno rememora los pronósticos de Mayor Oreja, que lleva años diciendo que ETA estaba ganando. La cosa es bien sencilla: el PNV resiste atado de pies y manos al PSOE (y el PSOE en el Congreso al PNV), Bildu se convierte en alternativa real (y sigue siendo socio de Sánchez), y los cuatro partidos nacionales salvan la cara pero seguramente pierden salva sea la parte en aquellas tierras, cada vez menos españolas. Y poco más.
Aunque los hay que lo pintan más descarnado: ABC por ejemplo, preguntándose si es que el PP no entiende a Euskadi o si ese partido es sólo una mala copia de quienes allí de verdad mandan. Pero para colmo de análisis y síntesis a la vez, OK Diario, que titula “PNV y ETA empatan a escaños”.
Desde luego que Bildu no condenara la violencia ni calificara a ETA de terrorista no parece haberle afectado electoralmente. Como seguramente no le afectará a Vox que una de sus dirigentes, consellera, se limite a decir de Franco en LP que “es un personaje histórico”. Núñez, se llama. Pero no Núñez Feijóo, conste. Porque los del PP, a las mismas horas, decían en el periódico de al lado, Levante, cosas como que “nadie puede estar del lado de Franco”. Broseta, se llama. Y es hijo de víctima de ETA. Qué curioso: Franco tapando a ETA. Como en vida tapaba huelgas y convocatorias de algaradas o primeros de mayo con partidos Real Madrid-Barça.
Qué curioso, sí, como anoche, que había elecciones en las que empataba Bildu y ganaba el Madrid. “Y así el círculo se cierra y la gente ni se entera de lo que ha ocurrido ya, como cantaba Miguel Ríos en los 80.