Según la Sociedad Española Neurocirugía (SENEC) se estima que aproximadamente el 20% de la población mundial sufre de hernias discales. Una condición que afecta a la columna vertebral y puede generar dolor crónico, limitación en la movilidad e incluso discapacidad temporal o permanente si no se trata adecuadamente.
Tal como explica el doctor Jose Piquer, responsable de la Unidad de Neurocirugía del Hospital Vithas Valencia 9 de Octubre, " las hernias discales ocurren cuando el núcleo gelatinoso de un disco interverterbral se desplaza hacia afuera, presionando las raíces nerviosas cercanas. Este desplazamiento puede generar una serie de síntomas, desde dolor localizado en la espalda o el cuello hasta molestias irradiadas en brazos o piernas, conocidas como ciática. La afectación varía según la ubicación de la hernia y la presión ejercida sobre los nervios" quien comenta que "el 70-80% de las hernias de disco se producen en las vértebras lumbares y un 25-30% en las cervicales"
Las hernias discales son una de las principales causas de dolor lumbar y cervical en adultos, especialmente en los trabajadores que realizan esfuerzos físicos repetitivos, los deportistas y las personas que llevan una vida sedentaria. " Si bien no todos los casos requieren cirugía - explica el profesional - es crucial abordar la condición a tiempo mediante un diágnostico adecuado y un tratamiento personalizado, que pueden incluir fisioterapia, medicamentos o en casos más graves, ya que, si la hernia de disco se diagnostica a tiempo, "la recuperación podría ser absoluta. Sin embargo, la cirugía es factible en los casos que después de pasar un tiempo razonable el dolor continúa o en los casos de déficit mieloradicular".
El especialista subraya que "muchas personas desconocen los síntomas iniciales o ignoran su tratamiento adecuado lo que puede empeorar la situación. Entre los factores de riesgo más comunes se encuentran las patologías degenerativas, las afectaciones del ligamento, la edad avanzada, el sobrepeso, la falta de ejercicio, las posturas incorrectas y los movimientos repetitivos".
" Para prevenir o reducir el riesgo de sufrir una hernia discal, se recomienda mantener una buena postura, realizar ejercicio regularmente para fortalecer la musculatura de la espalda y evitar el levantamiento de objetos pesados de manera incorrecta. Además es fundamental prestar atención a los primeros síntomas, como dolores persistentes en la espalda baja o cuello, y consultar a un profesional ante cualquier tipo de alerta", subraya el docto Piquer.
No todas las hernias lumbares precisan de intervención. El 80% se tratan de manera conservadora con tratamiento analgésico y antiinflamatorio. Si tras mes y medio o dos meses no existe mejoría, se ofrece cirugía.
La Unidad de Neurocirugía del Hospital Vithas Valencia 9 de Octubre realiza intervenciones microquirúrgicas para el tratamiento de hernias lumbares y estenosis de canal, que entre otros síntomas, puede causar dolor en el nervio ciático. Esta operación se realiza a través de una incisión mínima de un centímetro y reduce el tiempo postoperatorio, quienes pueden ir a su casa unas horas después de la cirugía. " Nuestro equipo, señala el doctor Piquer, ha tenido el privilegio de formarse con uno de los padres de la microcirugía de la columna, el profesor PH Young de la Universidad de St. Louis (USA) y somos uno de los servicios con mayor experencia a nivel nacional"