La causa le obligó a dar un paso atrás y retirse de su puesto al frente de la concejalía de Fiestas en el Ayuntamiento de Valencia. Tras años de procedimiento, Perez Fuset, ha vuelto esta mañana a la Ciudad de la Justicia, en el marco de la causa en la que falleció un trabajador durante el montaje de los conciertos de Viveros en verano de 2017.

La familia de la víctima ha reclamado en todo momento cinco años de prisión para el edil por un delito contra la vida y salud de los trabajadores, así como por homicidio imprudente. Sin embargo, y tras un acuerdo con las compañías aseguradados encargadas del montaje, han retirado la acusación. A cambio estas tendrán que indeminzar con 220.000 euros a la familia de la víctima.

De esta manera termina el periplo judicia de Fuset. Rodeado de sus compañaeros de Compromís, y visiblemente emocionado Pere Fuset, ha culpado al Partido Popular de todo el calvario judicial, que aseguraba haber vivido.

Una vez absuelto, queda en el aire si este volverá durante los próximos meses a estar al frente de la concejalía de fiestas en el consistorio valenciano.