La planta de vehículos de Almussafes será la principal afectada por el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que la dirección de Ford España está negociando con los sindicatos. En concreto, se producirán alrededor de 960 despidos de los 1.144 que propone la compañía.

En efecto, estos despidos suponen el 84% del total, mientras que el resto de los trabajadores perjudicados pertenecen a la planta de motores (140) y las oficinas en Valencia (20) y Madrid (14).

En estos momentos, la planta valenciana cuenta con cerca de 5.900 empleados, por lo que la empresa prescindirá de casi una quinta parte de la plantilla actual. Así lo ha confirmado la multinacional americana al comité de empresa encabezado por UGT en la primera reunión de la comisión negociadora del que será el mayor ERE en la empresa en los últimos años.

Ford ha explicado que está llevando a cabo una reestructuración profunda de sus operaciones en Europa y "ha dado un paso más anunciando un redimensionamiento de su plantilla en España". "Trabajaremos conjuntamente y de manera constructiva con los sindicatos para minimizar el impacto de esta decisión en los empleados, sus familiares y la comunidad local", ha comunicado.

El presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, se ha pronunciado sobre esta situación, y ha asegurado que la administracón es "consciente de las dificultades de la industria del automóvil", por lo que ha asegurado que "defenderá, a través del diálogo, una buena solución".