El conjunto taronja saltó al Príncipe Felipe con Leticia Romero, Queralt Casas, Alba Torrens, Raquel Carrera y Marie Gülich. La primera del partido era para Massey y Romero no tardaba en estrenar a Valencia Basket desde el triple. Salida cerrando bien el rebote ante un combinado madrileño desacertado, y en ataque moviendo el balón y encontrando el aro.
Torrens cerraba el 10-0 para provocar el primer tiempo muerto rival. Movistar Estudiantes reaccionó con un 7-0 liderado por Fingall, recortando a 1 punto la diferencia. Ouviña salía a pista, ovacionada por la afición de su ciudad, para devolver el acierto a las taronja.
La tarea pendiente en ese cuarto estaba siendo parar a Fingall, que estaba encontrando muy fácil los puntos bajo el aro. Buenavida ponía el +4 desde el triple, pero un parcial de 5-0 para ellas, las colocaba con un punto de ventaja al final del primer cuarto. Solo una falta hecha en los primeros 10 minutos que evidenciaba la necesidad de subir un punto la defensa.
Importante la confianza de Ouviña en el inicio del segundo cuarto, pese a que seguía siendo necesario mejorar atrás. 7-2 protagonizado por la aragonesa, para devolver la ventaja al equipo y poner un +4. Sin embargo, las hermanas Massey hacían mucho daño en la pintura y desde el exrerior.
No había forma de pararlas. 9-0 y subían su máxima hasta el momento en 5 puntos. Aparecían Carrera y Romero con un 7-0 y la cosa iba de parciales. La alternancia de la ventaja en el marcador se iba sucediendo de esta manera, pero las sensaciones eran mejores para el equipo estudiantil y así quedaba reflejado al final del periodo con ventaja para ellas (32-35).
Buena salida tras el paso por los vestuarios, con un 10-2, que provocaba el tiempo muerto de Movistar Estudiantes. El parcial llegaba a 12 y la ventaja a 7, encontrando ahora bien a Cox cerca del aro. Valencia Basket manejó la renta durante varios minutos, aunque sin llegar a romperlo y marcharse en el marcador. Fingall mantenía a su equipo a tiro y el periodo finalizaba con un pequeño colchón de 5 puntos para las de Rubén Burgos.
Salvadores subía a 7 la ventaja, pero durante varios minutos el marcador no se movió. El partido estaba muy trabado y los tiros no entraban. Transcurridos un par de minutos, Ouviña anotaba un importante triple que hacía el 5-0 y el +10. El combinado estudiantil entró en unos momentos de ansiedad que el conjunto taronja supo aprovechar.
El técnico rival pedía tiempo muerto. Gülich lo ampliaba a 8 y la máxima a 13 con un triple a continuación. Méndez lo frenaba. Ouviña aparecía otra vez para echarle un jarro de agua fría a Movistar Estudiantes. Otro triple y ahora la ventaja era de 17 puntos a falta de 5 minutos para el final.
Méndez se echó a las espaldas el equipo con clarividencia y confianza en ataque ante las urgencias. Massey cogía el testigo y dejaba a las suyas a 10 puntos a 2:35 del final. Rubén Burgos lo paraba. La tensión aumentaba y el tiempo bajaba. Ningún equipo anotaba, cosa que favorecía a las taronja. Buena defensa y victoria. A semifinales.