Este miércoles, un hombre falleció en Valencia al precipitarse por el hueco del ascensor del edificio en el que residía. Se trataba de un invidente de 58 años que vivía en el quinto piso de la finca.
Fue un operario de la compañía de ascensores quien, realizando tareas de reparación, encontró el cadáver al iluminar el foso.
Al parecer, el fallecido quiso coger el ascensor en su piso y, al no poder, bajó a la tercera planta. Allí pudo abrir la puerta y fue cuando se precipitó al vacío.
Ahora, la Policía Nacional investiga lo sucedido para encontrar respuesta a lo sucedido. Según los vecinos, el aparato funcionaba bien ese mismo día y no había sufrido fallos recientes.