La Policía Nacional ha detenido en una localidad de la comarca valenciana de la Ribera Alta a tres hombres, de origen español y de edades comprendidas entre los 22 y 50 años, como presuntos autores de un delito de detención ilegal, por supuestamente mantener encerrada a la pareja de uno de ellos en una caseta en ruinas en la que vivían.

Al compañero sentimental de la víctima también se le imputa un delito de malos tratos en el ámbito familiar, pues le habría insultado, propinado bofetones, tirado del pelo e incluso agredido sexualmente, según apuntan fuentes policiales.

Los agentes tuvieron conocimiento de los hechos el pasado 18 de marzo, después de que la víctima lograse huir de la caseta donde permanecía encerrada, gracias a la ausencia de dos de los hombres y a que el tercero aún no había cerrado la puerta.
Tras atravesar varios campos, llegó a la carretera donde pidió ayuda a unos vecinos que circulaban por la zona con su vehículo, trasladándola estos a la Comisaría de Policía Nacional de Alzira, donde relató lo sucedido y fue asistida por los agentes.

La mujer, de origen francés y sin familiares en la zona, habría alertado a unos amigos de su situación en un momento en el que pudo tener acceso a su teléfono móvil, poco antes de escapar de la vivienda. Esos amigos, a su vez, comunicaron los hechos a una comisaría francesa, que alertó a la Policía Nacional, recibiéndose la notificación de lo sucedido cuando la víctima ya se encontraba en dependencias policiales. 

Los investigadores averiguaron que la mujer habría conocido a su pareja en Francia hace unos meses y que en enero se trasladaron a una localidad de la comarca de la Ribera Alta, donde se instalaron con unos familiares de él en una caseta en ruinas sin las condiciones mínimas de habitabilidad, pues carecía de luz y agua.

Los agentes localizaron a los sospechosos, siendo estos detenidos como presuntos autores de un delito de detención ilegal. A la pareja de la víctima, además, se le imputa un delito de malos tratos en el ámbito familiar.

Los tres arrestados tienen antecedentes policiales. El compañero sentimental de la mujer ha pasado a disposición judicial, mientras que los otros dos han sido puestos en libertad una vez oídos en declaración, tras ser advertidos de la obligación de comparecer ante la autoridad judicial cuando sean requeridos.