Tras casi 10 meses de trabajo, esta mñana ha reabierto en Torrent la última de las carreteras de titularidad autonómica afectada por la Dana.
El president de la Generalitat, Carlos Mazón, ha destacado que con la apertura en su totalidad de la CV-33 “se completa la reconstrucción íntegra y definitiva de las carreteras autonómicas dañadas por la riada, que se ha realizado en tiempo récord y con el esfuerzo más importante que jamás ha hecho un gobierno autonómico tras una catástrofe”. Así, ha puesto en valor que la plena operatividad de las vías afectadas se haya realizado en tan solo nueve meses, “un año antes de lo que las previsiones técnicas nos presentaban”.
El jefe del Consell se ha pronunciado de este modo tras la reapertura de esta infraestructura, en la que la Generalitat ha invertido 12,5 millones de euros y que recupera los cuatro carriles de circulación que tenía antes de las riadas para dar pleno servicio a los 17,5 millones de coches que transitan al año.
La apertura de esta vía, que se ha rehabilitado más preparada y resiliente ante posibles emergencias, supone “un paso extraordinariamente importante hacia la total recuperación” y se convierte “en uno de los símbolos de la conectividad, de la normalidad, de la reintegración que necesita Valencia y de nuestra capacidad de levantarnos”.
El jefe del Consell ha destacado la celeridad, el esfuerzo y el trabajo colectivo realizado por el Ejecutivo autonómico junto a la Diputación y los Ayuntamientos para recuperar las carreteras dañadas por las riadas en el menor tiempo posible. Así, ha recordado, que en “tan solo dos semanas la práctica totalidad de las vías de la Generalitat habían recuperado provisionalmente gran parte de la movilidad, lo que ya fue un hito”. También ha indicado que se trata de un esfuerzo que está realizando la Generalitat en solitario, sin más opción que el endeudamiento. Pese a ello, ha incidido que el Consell va a seguir adelante “con determinación” con la reconstrucción económica y social que merece la Comunitat Valenciana.